jueves, 14 de enero de 2010

Los mayores de Lupert




El primer contacto que tuvo Lupert, todo inocencia, con las hieles fue la frase que a escondidas oyó mascullar una mañana de marzo al sacristán de la parroquia de San Bartolomé.

-Oh, quítame de encima este cinismo repugnante.


12 comentarios:

  1. Frase tremenda, aún más escuchada de boca de un sacristan.

    ResponderEliminar
  2. Sí, es tipo Alma Tadema, pero es de John William Godward.

    ResponderEliminar
  3. Pobre sacristán, parece que del Tirol nos hemos pasado a la Suecia de Bergman.

    ResponderEliminar
  4. Y San Bartolomé, en cuanto a tremendo, no se queda corto.

    Se queda desollado.

    ResponderEliminar
  5. Claro, el cinismo como una piel gruesa que protege pero que nos hemos de quitar.

    ResponderEliminar
  6. J.Los guerreros de DIOS se caracterizan por que INSISTEN...RESISTEN...PERSISTEN..se ESFUERZAN..y PROGRESAN donde otros se REGRESAN....que nada te DETENGA..!!!!Mil Bendiciones para ti y siempre FELIZ FELIZ CUMPLEAÑOS..!!!!

    ResponderEliminar
  7. JA! JA!! JA!!JA!JA!!JA!!!JA!!!
    Un placer vuestro recuerdo, Sanadora.
    Magullado hasta la muerte, diría yo! ¡¡Pero mordiendo!!
    Y cuando muera, ¡a seguir sobre dos patas! Y cuando vuelva a morir, entonces veremos.
    ¡VIVA VENEZUELA!

    ResponderEliminar
  8. No importa las magulladuras, POETA lo importante es cuanto se muerda y seguir como tu dices en dos patas.Gracias por ese VIVA!FELIZ CUMPLE!!!!Un vinito tinto por la vida!..

    ResponderEliminar
  9. No importa las magulladuras, POETA lo importante es cuanto se muerda y seguir como tu dices en dos patas.Gracias por ese VIVA!FELIZ CUMPLE!!!!Un vinito tinto por la vida!..

    ResponderEliminar