[En EL CORAZON DEL BOSQUE se dedicaron bastantes textos al tema del antiprohibicionismo. Probablemente éste, que incluí en el nº 4, sea el que todavía me sigue pareciendo más vigente y cabal, ya de vuelta hoy de aquella ingenuidad que me llevó a formar parte de la Lista Antiprohibicionista en las generales de 1989 junto a compañías que el tiempo me acabaría arrojando por el sumidero de la decepción (como Leopoldo Alas, Yolanda Alba o los radicales italianos)]
DROGA Y ESTADO
En diversos momentos, al plantear a opciones ya establecidas (a Falange Auténtica en octubre del 80 o a Sin Tregua a fines del 90) mis opiniones sobre el tema «Droga», procuré presentar sugerencias prácticas de gestión precisamente para evitar el clásico cliché de utopista.
Daba, por ejemplo, una especial importancia a la creación de un Instituto Nacional de Estupefacientes y Sustancias Psicoactivas, coordinado por la administración estatal y encargado de los cometidos siguientes: investigación de las sustancias susceptibles de tal calificativo, educación en el consumo (de las sustancias admitidas), restricción del consumo (para niños, adolescentes y adultos no responsables), campañas de disuasión (en sustancias consideradas básicamente nocivas) y rehabilitación de adictos. Este organismo funcionaría como un departamento autónomo del Ministerio de Sanidad y en estrecho contacto con Educación, Consumo, Interior y Justicia.
La existencia del INESPs conllevaría la fiscalización de iniciativas privadas de rehabilitación, persiguiéndose las consideradas fraudulentas e integrándose las que demostrasen su utilidad (que conservarían la pertinente autonomía pero controlando todo afán de lucro) en el citado organismo estatal. El mantenimiento del mismo no habría de considerarse a priori gravoso pues, dado el cambio radical de distribución de presupuestos en una situación revolucionaria (cuando los capitales se movilizan por prioridades comunitarias y no en base a las corruptelas oligárquicas e individuales), no puede contemplarse la creación de una iniciativa semejante según los parámetros económicos hoy vigentes. De cualquier modo, recuerdo que proponía destinar al mantenimiento del INESPs los fondos requisados en la persecución del narcotráfico a lo que se añadirían campañas públicas de recaudación (que, yo, enemigo acérrimo de beneficencias y limosneos, veía concretizadas en régimen fiscal de impuestos especiales de ayuda comunitaria) más la inyección económica que supondría la fiscalización de las antes mencionadas iniciativas privadas.
En el campo puramente de investigación, yo añadía, aparte de la labor puramente científica, y en consonancia con la resacralización de valores que defiendo como alternativa al materialismo imperante, equipos de expertos en Estudios Tradicionales, Filosofía, Historia de las Religiones...: esto es, sin que la tarea del INESPs perdiese un ápice de eficacia (desde el punto de vista más pragmático), redimensionarla en un marco de valores más elevado.
A estas alturas, dilemas como «prohibicionismo-antiprohibicionismo» o «prevención-represión» se caen por completo ante el auténtico dilema «control-descontrol». Yo sitúo al INESPs en una perspectiva revolucionaria en la que la comunidad movilizada y coordinada funcionalmente a través de un Estado representativo enfrenta el tema de estupefacientes y sustancias psicoactivas con serenidad,equilibrio y firmeza en la actuación, sin escrúpulos farisaicamente liberales ni alardes compulsivamente musculares, buscando el equilibrio más atinado entre libertad y responsabilidad.
A diferencia del antiprohibicionismo burgués, mis propuestas y críticas al prohibicionismo no son acrateces (aunque no puedo evitar que se lo parezcan a unas cuantas cabezas cuadradas): mis tiros van más hacia lo anarca que hacia lo anarcoliberal. Pienso que, si una revolución puede ser mejor respecto a las anteriores, la cosa estriba en no buscar atajos, en no simplificar, en tener un respeto enorme por la complejidad inherente a la tarea de Gobierno, sacando adelante a la mayor cantidad de gente posible, respetando y no avasallando, regenerando y no dejando hacer (en la insolidaria acepción liberal): una revolución que tire a la basura a miles y miles de sujetos, bien por represión autoritaria bien por ultraliberal negación de asistencia, lleva en ese despilfarro de gente la semilla de su propio fracaso.
Si deseáis disfrutar de otros textos sobre antiprohibicionismo, muy fácil: pulsad aquí
23 comentarios:
Señor, supongo que tiene el mencionado plan desarrollado y a punto; pacientemente, guárdelo como un tesoro.
Si se da cuenta, esto es un Think Tank potente; cuando menos.
El plan, como ya dije aquí , quedó en esbozo, en punto de partida. Estas cosas se pueden desarrollar si más gente las apoya y contribuye a ello tanto anímica como intelectualmente. Mucho de lo escrito y presentado en encuentros y congresos tanto del CDS como de FE/JONS en los 90 ni lo conservo, quemado hasta el tuétano por la falta de atención y de respeto sobre lo presentado. Este texto, como lo del MDA (que, en buena medida, era la "carta magna" que lo contenía junto a otros temas), puede desarrollarse si se dan las circunstancias y se produce una sinergia con gente que se lo tome en serio (lo que digo al final de la entrada MDA). Obviamente, cuando me deshice al comienzo del 2000 de mucho material presentado a reuniones de partido, lo hice por pensar que no iba a ninguna parte en el mundo de la política (y, como tampoco creo en la posteridad -nos heredarán los simios, como siempre señalo, que se preguntarán qué coño era esa muñeca parlante-, tampoco le encontraba sentido conservarlo como documentación memorialística).
¡Vaya, que yo me refería al INESPs!
En cuanto a todo lo demás, a parte del interés como material socio-político y de su utilidad actual como desactivador de clichés/estereotipos/cerrojazos/nublazones/cobardías mentales, habría que actualizar, revisar y discutir algunas cosas, predominantemente a nivel superficial; pero creo que no hará falta porque a día de hoy el único modo de implantar lo que propones es un regreso a la Naturaleza original del hombre, y eso, cuando se logre, hará que todo funcione sólo, rápido y fluido.
Volviendo al INESPs pero al hilo del mencionado logro, como en esta fase de la espiral tampoco parece posible administrar de manera universal y responsable las drogas necesarias para desatascar los canales, habrá que esperar a que el petardazo (en vez de en el cerebro de cada cual)sea afuera y se lleve por delante a varios cientos de miles para que al resto le entre pánico y empiece a hacer caso (registrar los mensajes).
El problema no es que esta sociedad sea una sociedad de esclavos, el problema es que merecen ser esclavos. (Remito a la frasecita de Bob Marley: FREE YOURSELF FROM MENTAL SLAVERY)
Nuestra batalla por la recuperación del poder es cuerpo a cuerpo, de ahí que toda misericordia deba entenderse desde el rigor y la severidad. Porque cada dejación en nuestras funciones como wakan es sacrílega y será aprovechada en nuestra contra y eso es respiro para el enemigo. Son tiempos de Guerra.
Cuando se maten entre ellos, habrá que salir a poner a orden, y es más eficaz instruir con arte que con política; de igual forma que la Palabra arrasa a la falsedad.
Esto es Piel de Lobo.
Perdón, yo no entiendo bien lo de la "recuperación" del poder. Yo nunca he tenido el poder. Claro que hay cosas que he perdido, pero no esa.
Ah, pues entonces usted no lo recupera. Todo hombre tiene poder y no usarlo va en contra de su naturaleza, lo desacraliza y agilipolla.
Ah, es un poder sobre uno mismo. Lo había entendido como poder político.
En ese caso sí, pero más que recuperar yo diría conquistar, o incluso no resistirse.
Sobre uno mismo y sobre los que no tienen ese poder, Señora; que si no jamás saldríamos de tanta falsedad.
En esto, como en mi antiguo seudónimo, soy chinoide, y creo más bien en aprovechar los vientos para volar con ellos que en la acción positiva.
La energía la tengo, lo que pasa es que me sale por donde no debería.
Pero eso es una cosa que me pasa a mí, y aquí no importa. Lo siento.
Quiero decir que más que el plan, lo que hace falta es la disposición para cumplir el plan, que supongo que se parecerá a obecederse a uno mismo.
Señora, ¿por eso vuela con nosotros? ¿O ha sido la casualidad?
Como usted sabe, poco tiene nuestra acción de positiva, pues, incidiendo en lo mismo, lo que hace falta es acción negativa. Que para estar conforme y dejarse llevar, se valen los esclavos.
No, un esclavo también puede ser uno que se resiste.
Cuando he dicho acción positiva, me refiero a acción activa, y con acción negativa quiero decir pasiva.
No creo que sea la voluntad lo que a uno le libera.
Estoy contestando medio a vuela pluma y me sale todo un poco ambiguo o galleguizado.
Me parece que más bien sirve el olfato para colocarse donde a uno le corresponde. Eso es lo necesario.
Abstracciones
Divagaciones
Concrete o hablamos en otra ocasión
Un esclavo es un esclavo
Y el que resiste es un resistente
Y el que pelea un guerrero
Sobre el olfato, mejor ni opino
Muy bien:
Uno puede ser esclavo de la resistencia que presenta. Un dique es una resistencia, e impide el fluir del torrente. Y ahí, es el dique el que representa la voluntad (que es una voluntad pasiva, porque le basta con estar para no dejar pasar el agua).
Se hace uno esclavo de querer liberarse, por ejemplo, porque entonces está bajo la férula de su deseo.
O se hace uno esclavo resignándose a serlo, también, claro.
Es como los objetos sagrados para los hindús, que son sagrados durante el rito y luego son meros objetos de madera, o de oro, o de lo que sean.
En cuanto hemos domesticado una cosa, la cosa muta. Como los símbolos en los sueños. Cuando ya sabemos lo que quieren decir, pasan a simbolizar otra cosa.
Del mismo modo, un liberto pasa a encontrar una nueva esclavitud contra la cual luchar.
O sea, que no se puede decir que ese haya dejado de ser esclavo, sino que lo es de otra manera.
Y hay que salir esencialmente, no formalmente.
Un verso de John Ashbery:
God will find the pattern and break it
Una canción que no tiene mucho que ver, o sí.
Sigo rogándole que por favor concrete. No sé de qué narices habla. ¿Esclavos que no lo son y libertos que son esclavos?
Ambos falsos.
Si se refiere usted al Tao, aplíquese el cuento.
Eso trataré: o sea, confiaré en ser aplicada por el Tao.
También yo, Señora
Qué antichateo más tumultuoso, casi tanto como la película de Fuller que me acabo de ver mientras ustedes vosotros estabais en pleno enzarce dialéctico. LA CASA DE BAMBU.
Yo ni entro ni salgo en su enzarce. Me atengo a lo dicho en el segundo comment y, claro, en la entrada.
Bárbara, ¿te animas a pasarme alguna cosilla más para la web? Ya sabes que hay nueva prórroga.
Gracias por tener la paciencia de una roca.
Me gustan los elementos
Pues me encantaría, pero no me da tiempo. Tengo la tradu de Tennessee y una selección poemística pendientes y urgentes.
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