Higgs, Schrödinger y el desamor en un quark-to de hora…y media.
No sé si fue en Ginebra,
o en el fondo de mi gintonic.
El bosón de Higgs deshizo el hielo.
( partícula elemental hipotética +IVA en mi copa*.)
* Copa sin asa pues como dice el palíndromo: a la masa, asa mala.
No seas bosón,
explícame el origen de la masa
cuando el hielo de mi copa
está dentro de un grial en otro tiempo.
Eres la fuerza débil de mi bosón z y así
entenderé la macroscopia de tu alma
desde la microscopia de tus defectos
haciéndolos virtudes.
Eres, el alivio en la ruptura espontánea de esta simetría electrodébil.
Si, débil y eléctrica, en la ruptura.
Paradójica hipótesis que predecía una partícula neutra ,
muy neutra y muy particular.
Eres de la teoría la práctica
cuando aceleras tus protones
y retrocedes mi tiempo,
llevándome a los días
en los que abrazabas ninguna teoría ,
pero mi cuerpo.
¡ Existes partícula de Díos !
¡ Existes sin tus masas encefálicas ! ,
hipotálamo nublado, recámara nupcial
para el caminante gónada,
pero con tanto alma
que me pierdo en el trazo de tus vectores.
Mis protones colisionan a la velocidad de la luz que me apagaste,
a oscuras ,
me pegué tal batacazo que se puso en marcha el colisionador de Hadrones,
en la entrepierna , dolores.
A este cisma particular lo llaman “ hadrones de corazones”.
Revierte el flujo del tiempo y otros flujos que pervierto,
pues después de andar jugando con peligrosas ondulaciones en tus mundos paralelos,
te advierto de su peligro:
Déjate de investigaciones,
no busques a Diós en mi agujero negro
que terminará engullendo el dolor del mundo.
Si no encuentro a Higgs, ni a Walli ni a la Fé,
la culpa es del muy Bosón , diré,
que se llevó mi hielo a otras dimensiones,
dejándome la copa caliente
y un golpe en los cojones.
¿Por qué Schrödinger no me metió en su caja?
Te eligió a ti,
gata mía,
por tus pupilas de dos rombos.
Ahora vivo en tus universos paralelos.
En la incoherencia cuántica que me impide versarte,
no leerás mi besos porque nunca los he escrito allá en tu caja.
En mis labios, la tinta del besón de Gauge.
En mi poema experimental, la tonta del blusón en boxes.
Mirarte es el suicidio cuántico que me mata mil veces
y una me deja vivo
para seguir matándome.
Esa es la inmortalidad del dolor
y en otra Ginebra aún no lo saben.
Clorata de Potasa y su antipartícula/r.
15 comentarios:
Ya era hora, buena señora, de estrenarse.
Cuántico tiémpico sin saber de vd.
Vamos a traer a las letras una cosa: ¡el estilo cuántico!
Tantico en el tono guasón de Higgs como en la estructura insospechada y real!
Como la vida misma
Si que me ha costado pero así es la cuántica, estaba pero sin desplazarse ya no estaba y así hasta que me habéis invitado mil veces y se perdió por el camino!
El estilo zaragonazo del zurdo..Ay! qué bonico es! Mi vida si que está algo tipo colisionador de los hadrones pero os sigo de cerca.
Bienaventurados los que colisionan porque de ellos es el reino de los cielos.
Por cierto, ¿no predicaba Jesús a los hadrones?
No se dice bonico, se dice bónico, hiperbónico diría yo (que suena a específico efervescente y carbonatado de la palabra).
¡Qué buena!
Bárbara, a ver si el ejemplo de Guiller te estimula, que tienes muy huérfanos al Luminar y a tu propio blog (¡tu propio blog, descastada!).
Ah, Guiller, por cierto, me encanta la etiqueta...
Es que soy una madrastra descastada.
Clorata cuántica...agujeros negros, gatas y ginebras formando universos...bingo!
¿"Dios no juega a los dados" querrá decir que juega al bingo?
O a los juegos de rol
Dios juega a los dodos.
Sí!!!!Ja! ja!!! ja!ja! ja!!!
yiyi,
espectacular
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